Por: Armando Melendez periodista bien dateado
Santiago de Cali, 13 de marzo de 2025
Por primera vez en años, Cali da un paso concreto hacia la integración del transporte intermunicipal con su sistema masivo. A partir de este viernes 14 de marzo, los buses provenientes de Jamundí podrán ingresar directamente a la Terminal Simón Bolívar del MIO, permitiendo una conexión más fluida para miles de pasajeros.
Este cambio, promovido por la Alcaldía de Cali y la Autoridad Regional de Transporte (ART) Movamos Región, ha sido recibido con expectativas y dudas. Por un lado, representa un avance en la consolidación del Área Metropolitana del Suroccidente Colombiano (AMSO), facilitando la movilidad entre municipios vecinos. Sin embargo, también plantea interrogantes sobre la viabilidad de una verdadera integración del transporte regional.
El alcalde de Cali, Alejandro Eder, lo ha calificado como “un paso histórico”, asegurando que este es solo el comienzo. “Iniciamos con Jamundí y próximamente ocurrirá lo mismo con Puerto Tejada”, afirmó. Pero, ¿qué tan efectiva será esta medida para mejorar la movilidad de la región?
Beneficios y desafíos de la integración
En términos prácticos, la principal novedad es que los pasajeros ya no tendrán que descender fuera de la terminal, lo que mejorará la seguridad y permitirá conexiones más rápidas con el MIO. Además, podrán acceder a 13 rutas del sistema masivo sin costos adicionales más allá de la tarifa habitual del MIO.
No obstante, la integración aún no contempla beneficios tarifarios entre los dos sistemas de transporte. Actualmente, los pasajeros que vienen de Jamundí deben pagar por separado su pasaje intermunicipal y el del MIO, lo que podría desalentar el uso combinado de estos medios.
Otro punto crítico es la infraestructura. La Terminal Simón Bolívar ya enfrenta altos niveles de congestión, y la llegada de más buses intermunicipales podría agravar la situación si no se implementan medidas adecuadas de control y logística.
¿Hacia un sistema metropolitano de transporte?
Este modelo de integración es apenas un primer paso en un plan más ambicioso. Las autoridades han mencionado que, en el futuro, municipios como Palmira, Candelaria y Yumbo también podrían conectarse con el MIO a través de terminales estratégicas como Paso del Comercio y Menga. Si se logra, Cali podría dar un salto hacia un verdadero sistema metropolitano de transporte, algo que otras ciudades del país han intentado sin mayor éxito.
Sin embargo, para que esto funcione a largo plazo, será necesario avanzar en la unificación de tarifas, mejorar la capacidad operativa de las estaciones y garantizar un servicio eficiente que realmente motive a los ciudadanos a dejar el transporte informal.
Por ahora, el inicio de la integración con Jamundí es un avance, pero su éxito dependerá de la respuesta de los usuarios y de la capacidad de la administración para ajustar el modelo en función de la demanda real. De lo contrario, corremos el riesgo de que esta integración se quede solo en el papel, como ha ocurrido con otras iniciativas de movilidad en Cali.
Habrá que esperar a ver si este primer intento es el inicio de una transformación real o simplemente otro experimento en la larga historia de intentos por mejorar el transporte en la ciudad.
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